4x04 A summer too hot

-...¿Keria?...- dije apuntándola levemente con el dedo fingiendo duda y luego de unos segundos extraños para ella, sonreí demostrando alegría que antes había ocultado -Coincidencia extraña, pero agradable... si no te viera ahora, hubiese apostado que aquella noche en el bar vi a la diosa Afrodita que venia hablar un rato con los mortales- bromee un poco con la mitología griega, Afrodita la diosa griega del amor y belleza, pero sobre-todas las cosas lujuria -Y cuéntame... ¿Vienes las Vegas por los casinos?- le pregunte bromista ya que en la primera vez nos encontramos en otra ciudad y en otro lugar muy distinto, ademas las Vegas era famosa por sus casinos y espectáculos.
-Seguro que eso se lo dices a todas- me respondio con una sonrisa en sus labios, bromeando -Tengo que reconocer que esa noche me lo pase muy bien, no se si llege a decirtelo- realmente no recuerdo que allá escuchado eso proveniente de sus labios, quizás en mis pensamientos, pero de ella no -¿Los casino? Ohh, no en absoluto. Vivo aqui en la Ciudad de Pecado- así que vivía aquí, en Las Vegas, interesante, un dato muy interesante -¿Y tu? ¿que haces por aqui? ¿Estas aqui por negicios?- claro que estaba aquí por negocios, yo era un extraño para esta ciudad, aunque mi estilo de vida quizás no lo era, pero yo mismo si.
-Acertaste...- respondí tranquilo mirándola fijamente y le sonreí levemente -Los negocios son los que me traen este lugar pecaminoso- fingí algo de susto al principio de hablar pero finalice con una sonrisa gustosa, que se la dedique a ella -Vengo a cerrar un trato. Y que mejor lugar para cerrar un trato que...- le decía y deje que ella terminara la frase por mi... era una forma de jugar un poco con la obviedad -la ciudad de...- añadí para darle un pista mas a mi frase. Las personas con quien iba a cerrar al trato tenían una fama de ser apostadores y amante de los casinos, así que "La mano" decidió que yo fuera a su lugar favorito a cerrar el trato con ellos, yo solo recibiría una maleta que contenía dentro una laptop que estaría en el guarda equipaje del hotel del casino y luego ingresaría un numero que solo yo sabia en este país, que me daría acceso al usuario secreto de la computadora que contendría los archivos que esta gente ludopata quería.

La verdad es que me estaba volviendo loca y aquel beso fue como una anestesia, no podía imaginar que esto pasaría el día de hoy y de nada me servía ponerme nerviosa, necesitaba tener sangre fría para esto porque si no iba a meter la pata y no era lo que quería ni necesitaba en estos momentos Tienes los chalecos en el coche verdad? dije antes de salir del csi no podía estarme tranquila, lo estaría cuando nuestros hijos estuvieran con nosotros y en casa Espero que no pase nada murmure mientras nos subíamos al coche, no me di tiempo que ya habíamos llegado hasta que sentí las manos de Mac, me baje no tenía demasiadas ganas de hablar en este momento, me puse el chaleco antibalas y me dirigí hasta el encargado del operativo de rescate Tienen idea de que es lo que quieren? pregunte mientras terminaba de acomodarme y mirando a todos los presentes, si alguien se atrevía a echarme no iba a hacerlo, me quedaría aquí hasta que mis hijos estuvieran bien.

Me sentí un poco mejor cuando me abrazo, anhelaba ese abrazo y a pesar de todo comenzaba a sentir algo por ese hombre aunque según los psicólogos solo sería porque me sentía segura con él, pero no era eso, necesitaba la cercanía con él, escucharlo, verlo, sabía que eso no era sano pero no podía evitarlo, él había estado 15 días conmigo y eso iba más allá de su trabajo, lo sabía bien, no era la primera vez que pasaba por esto, suspire mientras tomaba una manta y un libro para leer necesitaba despejarme de todo lo que estaba pasando. Me recosté sobre el sofá aunque me sentía algo culpable porque él siguiera aquí cuidando de mi siendo que ese no era su trabajo, aunque no quería que se fuera Teniente, no sería conveniente que fuera a descansar un poco? Ha estado vigilándome durante 15 días, debe descansar un poco y si vale que no eran 24 horas pero si casi 20 las que estábamos juntos Hay policías en casa, no creo que pase nadadije mirándolo algo preocupada y un poco arrepentida, que seguramente tenía una vida fuera de su trabajo.